El artículo aclara la reducción histórica en la deforestación de la Amazonía brasileña en la década de 2000. El estudio no encuentra evidencias de trade-offs entre la agricultura y la conservación de los bosques. En cambio, establece que las reducciones en la deforestación en municipios prioritarios fueron acompañadas de aumentos en la producción y productividad ganadera (ganado / hectárea), consistente con un modelo en el que las directrices obligan a una disminución del valor agregado de la deforestación, haciendo que los agricultores con restricciones de crédito cambien las inversiones de la deforestación para inversiones de capital en la agricultura. El artículo también sugiere que en regiones con grandes brechas de productividad y donde las tecnologías para aumentar la productividad están fácilmente disponibles, los esfuerzos para restringir la expansión agrícola por medio de mejores políticas de conservación forestal pueden inducir la intensificación.
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